Karate Bushido magazine, Oct 2005. Maître Keneï Mabuni L’ héritier du Shito-Ryu.

Kenei Mabuni Heredero de Shito-ryu.

Karate Bushido magazine octubre 2005

Traducción al español realizada por el autor de este blog, Lisardo Muniello.

Es uno de los últimos grandes maestros supervivientes. El estudiante entonces socio de su padre Kenwa Mabuni, fundador de Karate Shito-ryu, Keneï, el mayor de los Mabuni, se codeó con Gichin Funakoshi, Anko Itosu, Hironori Otsuka y Gogen Yamaguchi. Nos había recibido en su casa de Osaka hace unos meses. Lo encontramos todo sonrisas este verano en el maquis corso. Por nuestro corresponsal especial en Okinawa y Córcega Claude Corse.

"Al dominar el cuerpo y la técnica, lo espiritual se abre como una flor de loto"

• Su edad 87 años. El mayor de los tres hijos de Kenwa Mabuni nació el 13 de febrero de 1918 en Shuri (Okinawa).
• Su grado 10 'dan. Kenei Mabubi también es Sosai de la Federación Mundial de Karatedo Shito-ryu.
• Su escuela el Karate-do Shito-ryu original, enseñado por su padre Kenwa Mabuni (1889-1952), de quien es el sucesor oficial. Y el último superviviente del famoso clan Osaka desde la desaparición el 26 de junio de su hermano menor Kenzo. El acrónimo Shito-ryu toma el primer kanji de los nombres de los maestros del fundador de la escuela: Itosu e Higaonna.
• Su trayectoria Keneï Mabunia solía decir: "Empecé Karate en el vientre de mi madre". Desde muy temprano, compartió a diario con los alumnos de su padre y los profesores que lo visitaban para aprender sus Katas. Socio de sus manifestaciones en Japón, tras la marcha de la familia Okinawa, recuerda la inauguración de su modesto dojo en Osaka, el Youshukan. El Shito-ryu oficialmente vio la luz en marzo de 1939. Después de las masacres del ejército estadounidense en Japón llegó el Shito-ryu en un país sin sangre. Cuando su padre murió el 23 de mayo de 1952, Kenei, hora de llevar la bandera, tomó la antorcha. Se propuso conquistar el mundo con el título de segundo Soke y se detuvo en los Estados Unidos y América Central en la década de 1960. Fiel a su ciudad de Osaka, el maestro ha pasado todos los veranos en Córcega durante 18 años, con Hidetoshi Nakahashi sensei.

El ojo chispeante, el gesto seguro, el bloqueo deslumbrante no engañan: a sus 87 años, el maestro de Shito-ryu está exultante. En un grueso karategi sostenido por un cinturón de un hermoso negro (a diferencia de otros, no tiene prisa por ponerse rojo), el último representante de la escuela Shito-ryu vive su arte mientras respira el aire fresco de los maquis corsos en el temprano en la mañana: con apetito. Como todos los octogenarios de Okinawa, incluso los centenarios, Mabuni sensei goza de gran salud. Sin bastón ni anteojos, no duda en volar 20 horas en avión para llevar la buena palabra del Budo al fin del mundo, siguiendo la promesa que le hizo a su padre. Encantado de verlo dar vueltas riendo en medio de los 150 estudiantes de su pasantía anual de verano en Borgo (Haute-Corse), Hidetoshi Nakahashi, 8 dan, entre Ippon Kumite y Tanshin Hapo, no oculta su alegría: "está bien , eh, buen espíritu de familia! ¡Ha sido así durante casi veinte años! le encanta la barbacoa, el vino corso, los kiwis y las sardinas a la plancha. Unos meses antes, nos había dado la bienvenida a su modesta casa en Osaka, donde residen todos sus recuerdos. "En la época de mi padre, que aprendió todo con el Maestro Itosu (Nota del editor: el padre del karate" deportivo "en la escuela acababa de crear el Kata Pinan y había adaptado Bassai Dai) y el Maestro Higaonna, los Katas llevaban nombres Okinawenses derivados del chino; encadenamos las técnicas sin darles un nombre. Recuerdo que Funakoshi sensei solo conocía a Naifanshi, que repetía como un ejercicio gimnástico banal. Incluso había enviado a su hijo a Okinawa para aprender otros Katas.

Tres generaciones se encuentran en esta foto familiar, donde Kenei Mabuni conduce a su hijo en un pasaje de Kata Seyunchin bajo la mirada benévola de Kenwa Mabuni, el patriarca del clan Osaka.

“No saber el camino para vencer a los demás. Conociendo el camino para superarse a uno mismo ... "

Los Katas ralentizan el envejecimiento del cuerpo.

Hay que decir que las formas ancestrales de Okinawa que se enseñan en la escuela Shito-ryu de" técnico Kenwa "provienen de Estilos Shuri-te y Naha-te, que abarcan movimientos rápidos y trabajo a distancia, y técnicas de respiración de combate cuerpo a cuerpo del Kempo chino original. Cuidado con las ideas preconcebidas: según Mabuni sensei, el arte del combate no es un fin en sí mismo. Uno puede optar por ignorar la forma "extrema" de Karate Can Choi y practicarla como un medio de autodefensa (Bu-iku) de los Katas. “Mi padre comparó los Katas con los Sutras; ambos nutren el cuerpo y la mente. Veo cada día que la ejecución aplicada de Ketar revived Katas ralentiza el envejecimiento del cuerpo y regenera su energía. "Mientras no los repitas mecánicamente:" no es la memoria lo que fortalece el cuerpo, decía Kenwa Mabuni a sus alumnos. En cada edad de la vida, uno debe sentir el Kata profundamente dentro su ser y absorberlo como el olor del incienso que lo impregna por todas partes (Kun-ju) ”. A lo largo de los años, Keneïi Mabuni descubre otras técnicas de armas, mantenidas en secreto por su padre y transmitidas por el Maestro Arakaki, quien le enseñó Bô, Jô y Sai, o Sifu Wu Xian Gi, experto de la escuela de la grulla chillona. "También aprendí el arte. de Shuriken de ninjas con Fujita sensei, un maestro de Okinawa. Todas estas armas se complementan y amplían las armas naturales del cuerpo.

La verdadera riqueza del Shito-ryu.

Según Keneï Mabuni, el Karate tradicional engloba las técnicas de proyección y torsión. ¡Será el primero en obtener su diploma de fisioterapeuta presentando el Bunkai de Kata Seyunchin ante un jurado de judokas! Abierto al mundo que lo rodea, Mabuni sensei cultiva la tradición sin ostentación. Bastante escéptico de las virtudes del deporte competitivo, especialmente los Juegos Olímpicos, lamentando la estandarización de los Katas que deberían revelar la personalidad del practicante en lugar de borrarla detrás de una forma muerta, oponente de la "occidentalización", nos invita a acompañarlo en el fondo de su dojo. Detrás de la puerta de un armario, un altar. El heredero de Shito-ryu enciende una varilla de incienso para rezar frente al templo. ¿Homenaje a los antepasados, a su padre, a los espíritus (los Kami), a su arte? | l responde con una mirada divertida a la lente. Insignia de honor: abre un libro de visitas, en el que se encuentran fotografías amarillentas, artículos y cartas manuscritas de su padre. No creas que es nostálgico. Kenei Mabuni cultiva la verdadera riqueza de Shito-ryu con un poema de su padre, quien continúa mostrándole la urraca en sus sueños: "todas las cosas son devueltas al olvido, teniendo un solo fin, de esta manera. Karate, qué alegría , ah, por perpetuarlo ..